martes, 11 de noviembre de 2014

Correspondido.

 Y en eso consiste el querer ¿no es verdad? Correspondido. En darte mi corazón para que puedas llenar el hueco que ha djado el tuyo.

Ojalá, nos hubiésemos acordado de ello cuando repartimos nuestros vienes. Pero nadie dijo nada, porque el vertigo que sentía era demasiado denso, y el suelo nunca ha sido muy sólido bajo mis pies.

Y sin embargo, ahora comprendo que me quedé con lo más fascinante y doloroso de ti... o de mis recuerdos, porque en cada latido, hace acto de presencia tu sonrisa en mi almohada. Aunque estoy segura de que si tuviese mi propio corazón, cosido a mi alma, te recordaría igual-igual.

No se puede olvidar con tanta facilidad a la única persona que en un suspiro, te ha hecho creer en la magia de nuevo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario