viernes, 31 de agosto de 2012

El valor de un sueño

Vivir sin soñar porque no es realista, es como enamorarse sin corazón, llorar sin lágrimas, nadar sin empaparse, reirse sin carcajadas, volar sin alas, respirar sin olfato, ayudar esperando algo a cambio o  escuchar nuestra canción preferida y no sentir nada. 
Sin sueños la vida carece de valor alguno.

Los verdaderos sueños no tienen fin

Tu voz resuena una y otra vez entre estas vacías paredes, pero yo ya no puedo escucharte. En mi interior tan solo queda un silencio doloroso y el efímero sentimiento de correr perdida por este mundo que ahora parece mucho más frío y siniestro. Me he arrancado a mí misma lo único que me ha mantenido viva urante todos aquellos años de lágrimas evaporadas, convirtiéndome así en un fantasma que vaga por una realidad quue no me corresponde. Mi garganta está anudada por pañuelos amarillos cosidos con cuchillas y cristales rotos de los que un día fueron felicidad. Lo he perdido todo, a mi al rededor no me queda nada que tenga el menor sentido. ¿Qué debo hacer? Pregunto desesperada intentando evitar caer en un profundo avismo de emociones apagadas. Pero mi voz suena rota y desgastada y no puedo reprimir el deseo de corromper mis ilusoso sueños. Sin embargo, aún no he dictado el final de todas mis malditas emociones, este no puede ser el fin. No lo permitiré.
La música es la droga de los sentimientos

No te rindas.

Corro deprisa sin detenerme a observar el cluel rastro que ha dejado la realidad bajo este húmedo suelo. Necesito respirar, pero no puedo parar. Ahora no. Sin rumbo fijo, busco el lugar donde las palabras de decepción enterraron mis sueños. No veo nada, todo lo que ocurre a mi al rededor es una difusa neblina que no me deja apreciar los matices de la despiadada soledad. Sin embargo, yo sigo arañándome mis desnudos pies en esta tormenta de confusión y frío sin detenerme. Un día se me escapó un sueño, pero esta vez, no puedo parar hasta encontrar otro camino para alcanzarlo y retenerlo en el hueco que ha dejado el corazón entre mis costillas. Lo que menos me importa es perderme, ya que, sé que siempre permaneceré perdida si ni siquiera lo intento. Continuo corriendo, desapareciendo en esta espesa niebla, sin temor a encontrar terribles monstruos que me retengan. Mis piernas tiemblan y ya no me siento a salvo. Todo es cada vez más oscuro e inquietante. Tengo mucho miedo. "No te rindas. Por favor, ahora no te rindas. Te lo ruego."

viernes, 24 de agosto de 2012

Sé que es difícil de comprender, pero creo que, a veces, lo único que debemos hacer es aprender a vivir de nuevo.

miércoles, 15 de agosto de 2012

And if everything it's ok, help me to understand why I can't breathe.

Errores que hacen un camino

Me encuentro sentada en el colorido suelo, escondida en este bosque que me mantiene a salvo de mis miedos. Desde aquí sólo escucho como el viento le susurra secretos ocultos a los viejos árboles, los cuales observan confundidos mi inusual presencia. Dejo a mis pensamientos volar junto a las pequeñas mariposas rebosantes de libertad y valentía. Mi mundo interno se apacigua por los susurros que emite a mis espaldas la coherencia. Siento mucho mis errores, pero aún soy muy joven, y no comprendo en qué consiste la vida. Cada día que pasa aprendo a descifrar los latidos de mi corazón con lentitud, suponiendo que la única forma de aprender realmente de mí misma es equivocándome. Así que aquí estoy, elevando mi diminuta presencia en este gran mundo e intentando construir con mis propias manos, un hogar para mi silenciosa alma.
Déjame sentir la verdadera belleza de tu alma

viernes, 3 de agosto de 2012

Corre la vida...

y la vida corre y corre. Veloz y rápida. Sin esperar a nadie, y sin permitir que nadie le espere a ella. Pasa todo muy veloz. Y para cuando te das cuenta, todo lo que deseaste que comenzara con tanta ansia, termina, y no volverá jamas de nuevo a tu vida. Es una realidad triste y precisa. Es la vida misma entretejiendo los hilos de la experiencia en nuestra alma. Nos esforzamos en correr para que el tiempo pase más deprisa, pero al final tan solo deseamos quedar enredados en nuestro pasado. Curioso el destino, curioso el tiempo, curiosa la vida, que corre y corre, y no garantiza ninguna salida.