viernes, 29 de abril de 2011

Amor... algo imposible de describir
No pienso describir como es el amor. Es imposible transmitirlo entre líneas de un libro, en el matiz de un cuadro o en la melodía de una canción. Es simplemente algo inexplicable, algo que hasta que no llegues a sentirlo no sabes como es. Pero eso es lo que hace que sea tan especial, tan inalcanzable. Es el motivo por el que comienzas a luchar, con el riesgo de terminar en pelea. Arriesgarlo todo por esa persona que te ha dado sueños, esperanzas, ilusiones, felicidad... que te ha dado toda la belleza de la vida, sin pedir nada a cambio.

jueves, 28 de abril de 2011

Loca, pero feliz

Ya no tengo el porqué del dolor derramado. No comprendo el pozo negro en mi garganta. No siento esa pócima de felicidad en mi piel. No sé adonde ha ido el sufrimiento que sentía cuando el filo de un sucio cuchillo atravesaba mi mente y ordenaba todas mis ideas. No entiendo como ha sido posible llegar al límite de querer encontrar todas las puertas cerradas. No sueño con salir de aquí, ni siquiera sueño con estar viva. Porque yo sé que me estoy matando a mí misma. Despacio... pero lo estoy haciendo, ya me da igual donde ir, no espero que haya un lugar mejor que este. Muchos dirán que estoy loca, y puede que tengan razón, que al final me terminen encerrando en un psiquiátrico, pero de lo que estoy segura es de que nunca me había sentido tan viva y tan tranquila como ahora, y si quieren encerrarme que me encierren, porque sé que por lo menos allí habrá gente como yo, que lo único que quieren es vivir en sí mismos sin que nadie les altere su realidad, la misma felicidad.

jueves, 21 de abril de 2011

                                            Despertar con los ojos cerrados

Abro los ojos despacio, como si intentara no estropear los primeros segundos del respiro de la noche. Miro la pared llena de posters, de fotos, de recuerdos, de momentos inolvidables inmortalizados allí mismo al alcance de mi mano pero a la vez tan lejos. Mis ojos tropiezan con la pequeña cajita de madera. Allí guardados están todos mis secretos que he susurrado al viento y e soñado tantas veces guiada por mis novelas de caminos escondidos. Nunca he vuelto a leer un libro dos veces, porque recuerdo en lo que estaba pensando en ese preciso instante, como si de los matices de una muñeca de porcelana tratara. Respiro hondo y comprendo que le quiero, he vuelto ha caer en una trampa que tanto intenté esquivar. Muchas veces digo que le odio y es verdad, lo he sentido desde la sangre hirviéndome en las venas, pero hay días en los que no salgo, porque lo único que quiero es abrazarme a mí misma y nadar para ir en busca de todos los recuerdos que él hundió. Ahora todo es diferente pero no puedo evitar recordarlo cuando escucho esas canciones de ese verano mientras esperaba que estuviese al lado mío bajo el cielo estrellado. Cuando todo era ilusión de la inocencia... Hoy va a ser uno de esos días y sé que cuando me llame mi mejor amiga para quedar le diré que estoy ocupada para poder oír el tren pasar mientras me quedo en silencio, sola...

domingo, 17 de abril de 2011

                                         Suspiro

Mis labios susurran que te quiero olvidar, como si fuera tan facil apagar las llamas que de ti me han ido hechizando. Pero yo sé que siempre quedan cenizas que no se esfuman llorando...

viernes, 15 de abril de 2011

Impotencia

Te miro a los ojos, con la delicada esperanza de ver algo más que tristeza, de encontrar algún rastro de rabia. Me sonríes, pero a mi se me agujerea de nuevo el alma. No te das cuenta de que sé que me estás ocultando todo? Me siento perdida, después de tantos años eres una extraña para todas mis pesadillas. Aspiro a contártelo todo en estos pesados segundos, pero no lo hago porque me asusta el silencio, igual que a ti. Hay veces en las que me siento tan unida a ti que me da la sensación de que todo está como en ese borroso pasado del que tanto me acuerdo, pero no tardo en darme cuenta de que no es así y nunca podrá volver a serlo jamás. Quiero ayudarte, pero ninguna palabra es adecuada para salvarte del infierno. Comprendo que si no hago nada pronto te ahogarás entre las sombras de tu mente, pero me paraliza el miedo y la impotencia de saber que no puedo hacer nada mas que mirarte mientras cada gota de sangre desaparece en tus lagrimas para volverse de nuevo en ese secreto que no escribirás. Nunca me lo contarás, pero quiero que entiendas que nunca me apartaré de alguien que me ha dado tanta facilidad para que viva con una sonrisa cada día y hacerme sentir que no existe un pasado... que solo existimos tu y yo.

domingo, 10 de abril de 2011

Y de repente aparece algo, una vieja canción de la radio, un banco lleno de promesas, una mirada a la que nunca diste importancia, un recuerdo que no tiene sentido, unos pendientes abandonados en el fondo del armario, una vela que encendiste para apagarla, un libro de sueños ocultos y una palpitación sin motivo... y comprendes que las cosas mas sencillas son las que hacen que la felicidad parezca tan difícil de conseguir, aunque lo tengamos en la palma de la mano.

domingo, 3 de abril de 2011

Escapar

Lo único que deseo es disfrazarme de las solitarias sombras de la noche y acudir a tu lado. Me has hecho ahogarme con mis lagrimas, me has hecho susurrar mi propio grito, me has hecho cavar mi tumba... Te odio, pero me odio más a mí misma por mentirme. Acabo de perderme entre el arriesgado camino del olvido del viento, pero me da igual, sé que es el único escondite para salir de la libertad que me ha encarcelado tantas horas bajo el suspiro de mi melancólica alma. Arrastro cadenas rodeadas por dulces flores sin olor y llamo al diablo para que me lleve con él a algún lugar donde pueda estar sola con los fríos zapatos de la cruel conciencia. Quiero volver a tener inocencia para poder mirarme al espejo y no ver el monstruo en el que me he ido convirtiendo guiada por un suspiro de un alma perdida.

Soledad Infinita

Soledad Infinita

No soporto que me ahoguen con palabras. Estoy cayendo lentamente dentro de mí, como si me atraparan en una pesadilla y no haya manera de despertarme. Quiero gritar, pero nadie es capaz de escucharme. Estoy sola, sola contra mí misma. Lo único que quiero es encerrarme en mi cuarto para protegerme de los fantasmas del exterior. No comprendo por qué veo todo oscuro y mantengo la esperanza de que alguien me ilumine. Es una pérdida de tiempo. Lo sé. Nadie va a venir aquí a abrazarme y consolarme. No. Si nadie lo ha hecho hasta ahora, ¿porqué lo iban ha hacer hoy? Porque para comprenderme tienen que atravesar mi sonrisa con una bala y arrancarme los ojos con una cadena fría, como las noches de soledad infinita.

sábado, 2 de abril de 2011

La versión que nunca se cuenta
Estoy sentada frente al espejo. Guapa, muy guapa. Pero lo que refleja no es lo que quiero ver. Él sabe adonde voy realmente. Me observa desde el marco de la puerta sin moverse. Sé que le duele, no quiere verme en brazos de otro hombre. Pero no dice nada, ni yo tampoco. Yo le quiero, pero soy así y no tardaré en engañarle de nuevo. Le doy un beso fugaz en los labios, sin fuerza, sin sentimiento y obligándome a mí misma. Entonces él me sonríe pero me doy cuenta de que llora por dentro. Cojo mi bolso y camino sobre el frío suelo del pasillo tranquila, sin prisa. Sé que le estoy matando poco a poco y me duele. Nunca le e sido fiel, pero tampoco soy capaz de serlo, porque siento que realmente otros chicos necesitan mi compañía.
Lo único que quiero es un lugar para dejar que corran las garras que me atan al pasado. Sólo busco algo en mí misma del que enorgullecerme. Pero yo sé que es una guerra perdida que atraviesa con una bala todos los derrotados sentidos de mi vida. Desconozco el sonido de una risa susurrada entre mis partidos labios. Siempre viendo que a los demás les alaban por todo lo que yo nunca seré. Ellos son los depredadores que buscan que me rinda para aplastarme hasta que estén tan aburridos que lo único que desearán será burlarse de mis cenizas. Y yo no estoy dispuesta a darles ese gusto, porque aunque esté cayendo en picado desde dentro nunca lo mostraré por fuera. Es mejor morir sola a que me maten con entrecruzadas palabras. Sí. Mejor sola.