miércoles, 14 de mayo de 2014

La oscuridad es solo un color más

Hay una chica en el fondo de mi clase, que juro no haber visto hacer más que sonreír. Su aparente felicidad la protege de las palabras punzantes, pero nunca se preparó para los que procedían de su propia mente. Trata de sobrevivir en su roto mundo y enredándose con el silencio en las noches oscuras, intenta hacerse creer que nada es real para así, salvarse a sí misma.

Trata de refugiarse de la oscuridad de su mente proclamando que la soledad es lo que menos teme, pero lo cierto es que tiene tanto amor que dar en su interior, que cree que demostrarlo todo la destruiría. Pero no se da cuenta de que sus debilidades la hacen fuerte ¿Como es posible que alguien tan perfecto crea tan poco en sí mismo?

Puedes ver sus cicatrices a través de sus ojos; sin embargo, parece no comprender que son restos de batallas pasadas que indican que está ganando la guerra de su vida. Sospecho que sabe cual es el camino para respirar de nuevo sin miedo, pero no desea realmente caminar, porque el miedo la hace de hielo, y no cree ser lo suficientemente fuerte para luchar por la felicidad que no se permite a sí misma.


Hay una chica en el fondo de mi clase, que ha salvado a todo el mundo, pero ahora no puede salvarse a sí misma. Una chica que se ahoga con sus palabras porque el silencio es demasiado confidente. Hasta que un día no pudo despertar, y sus inseguridades quedaron como los únicos testigos de sus fantasmas. Y pensó que si su dolor fue justificado, fue el correcto. Pero hay problemas en el corazón que la mente no puede comprender. Cielo, sé que te mereces ser feliz.

Hay una chica en el fondo de mi clase, que juro no haber visto hacer más que sonreír.

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