París...

Es una especie de hechizo, cada vez que estoy más tiempo sin ella, más la necesito. Un misterioso encantamiento que me enreda ante su belleza. Es como si en poco tiempo te atrapase y necesitases volver. Sin ella, me siento completamente perdida y vacía, sin saber exactamente cual es mi lugar. Necesito su olor, su tacto, su forma de hacer del mundo algo hermoso... quiero volver a verla y que no me deje marchar nunca, entre las millones de calles escondidas de su tranquilo corazón. Pero pronto la volveré a ver, muy pronto. Y cuando tenga unos años más iré a visitarla. Volveré a por ti, mi querida ciudad. Mi París del alma.